El trabajo de las prisiones en Suecia está diseñado para promover la rehabilitación del preso y su reingreso en la sociedad. La pena de prisión se pretende desde el principio que sea una preparación para la reinserción en la sociedad.
Las penas privativas de libertad en el sistema judicial sueco van desde las dos semanas a los diez años. En el caso de reincidencia y la sentencia combinada de varios, la pena puede ser de hasta 18 años. Un preso condenado a cadena perpetua no puede ser excarcelado hasta que la sentencia sea conmutada a un período específico de prisión por el Tribunal de Distrito de Örebro. Para solicitar el cambio de calificación de cadena perpetua, el preso debe haber cumplido por lo menos diez años de cárcel.
El Kriminalvården o Servicio de Prisiones y Libertad Condicional sueco tiene 52 prisiones a su cargo. En estos centros penitenciarios había alrededor de 4.850 personas cumpliendo condena a finales de 2012.
En abril de 2013 había en las cárceles suecas 147 personas condenadas a cadena perpetua, cinco de ellas mujeres. El preso más antiguo de los condenados a la perpetua tenía 84 años y el menor 25 años de edad. Todos están cumpliendo condenas por asesinato (incluidos cómplices, asesinos e instigadores de intentados).
Cárceles de ida y vuelta
Aproximadamente 9.500 personas comenzaron penas de prisión en el transcurso de 2012 en Suecia. Las violaciones de la ley más frecuentes fueron las relacionadas con el narcotráfico, delitos contrabando, asalto y robo.
Los reclusos en Suecia pueden tener desde 15 años hacia arriba. Aproximadamente el 16% de la población reclusa es menor de 25 años de edad, el 43% tienen entre 25 y 34 años. El grupo de edad entre los 35 y 44 años de edad supone el 23% de presos y el grupo de mayores de 45 años supone el 27% del total
A fecha de 1 de octubre de 2012, en prisiones suecas cumplían condena 160 personas de edades comprendidas entre los 15 y los 20 años. realmente hay muy pocas personas menores de 18 años que sean enviadas a prisión. En su lugar, los jueces suecos buscan penas alternativas.
Cerca del final de año pasado, el 30% de todos los que cumplían condena en cárceles suecas eran ciudadanos extranjeros. Del total de presos suecos, o foráneos en las cárceles del país, el 1 de octubre de 2012 había un total de 270 mujeres cumpliendo pena de prisión, aproximadamente el 6% del total de reclusos.