El entorno europeo, con un crecimiento que no termina de despegar, y el clima de “inestabilidad política”, no restarán fuerza al crecimiento. Así lo prevé Funcas en sus estimaciones actualizadas de PIB de cara a 2015.
Al igual que ya lo hizo el BBVA hace unas semanas, estima que la devaluación del euro, el descenso del precio del petróleo, los bajos tipos de interés y la bajada del IRPF, juegan a favor de España.
Los cálculos de Funcas llevan a papel, lo que ya han anticipado el ministro español, Luis de Guindos, y el propio presidente del Gobierno, Mariano Rajoy. Es decir que España será el país que más crezca de la eurozona, y sobretodo, lo hará por encima del 2%.
A principios de noviembre, el BBVA Research mantenía su previsión de crecimiento en el 2% (igual que en los PGE del Gobierno), pero adelantaba la contribución positiva que supondrán varios factores.
Así, la entrada en vigor de la Reforma Fiscal, con un descenso del IRPF aportaría un 0,3% más de crecimiento. Además, la rebaja de los tipos propiciada por el Banco Central Europeo, implica un 0,5% más de crecimiento.
La bajada del euro, también impulsada por las medidas del BCE implicará un 0,5% adicional, al que se sumaría otro 0,5% si sigue descendiendo el precio del petróleo en el 20%.
Eso, si los principales riesgos en los que también coinciden Funcas y BBVA, no frenan la aceleración. Esos riesgos son el efecto desestabilizador sobre los mercados financieros y las economías emergentes de la retirada de la política monetaria expansiva en Estados Unidos, así como la subida de sus tipos de interés.